Pasa el tiempo en nuestra vida diaria y olvidamos que existen cosas como las virtudes. Sin embargo estas son vitales para no cometer continuamente errores, mismos que surgen por no pensar las cosas antes de actuar y no reflexionar en las consecuencias en el futuro cercano.
Vivimos de prisa, y así de rápido hay que pensar, sin embargo detenerse a meditar en las malas decisiones de nuestro pasado nos puede dar algo de experiencia para no caer en el mismo error.
La sabiduría es una virtud poco comprendida que te dota de conocimiento, experiencia, sensatez, humildad y paciencia para pensar y actuar acorde a cada momento. Por lo cual consideramos a la sabiduría un tesoro; algo digno para perseguir. “Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría.”
No es sabia la persona que tiene muchos conocimientos, sino aquella que los sabe utilizar de manera sensata. La sabiduría es un don o regalo de Dios, y esta se contrapone a la "sabiduría" del mundo. La del mundo es hacer lo que uno quiere para su propio provecho, razón por la cual muchas personas no tienen acceso a la verdadera sabiduría. “Porque la sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios…” Esta te hace sensato para con todas tus acciones, esa es su principal característica.
Es difícil pensar que viene del corazón “Cuando la sabiduría entrare en tu corazón…” Pero ahora sabemos que el corazón contiene un sistema nervioso independiente y bien desarrollado con más de 40.000 neuronas y una compleja y tupida red de neurotransmisores, proteínas y células de apoyo. Puede tomar decisiones y pasar a la acción independientemente del cerebro; puede aprender, recordar e incluso percibir. El corazón envía más información al cerebro de la que recibe, es el único órgano del cuerpo con esa propiedad, y puede inhibir o activar determinadas partes del cerebro según las circunstancias. El sistema nervioso del corazón es el primero en tratar la información que después pasa por el cerebro. Con ello entendemos que sin duda el corazón piensa, siente y actúa, ahora podemos comprender bien: "Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias."
https://www.revistaciencias.unam.mx/es/202-revistas/revista-ciencias-120-121/1996-las-neuronas-del-coraz%C3%B3n.html
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Es la sabiduría la que nos detiene en circunstancias difíciles de caer en peores errores, y nos trae tranquilidad en nuestras decisiones. Sin embargo, la verdadera viene de Dios porque Él es sabiduría. Pues lo que está oculto para el hombre en su saber limitado y mundano, para Cristo no lo está. Debido a que es el creador de todas las cosas en el cielo y en la tierra.
Un ejemplo para explicar lo que es la Sabiduría de Dios y la del hombre, es como tratar de meter todo el mar en un vaso o comparar una alberca con el océano.
El principio de sabiduría es el temor a Dios, así como apartarse del mal es la inteligencia. Sin duda para los incrédulos es muy difícil de entender y aceptar, al oír esto, muestran un rechazo en automático, debido a que no conocen a Dios, ni entienden que el sentir temor no es algo negativo. El temor a Dios es un temor reverencial, de respeto y admiración porque es todo lo justo, bueno, puro, santo, verdadero, misericordioso, amoroso, paciente, sabio, es decir todas las virtudes en su máximo esplendor y no solo es Santo, es tres veces Santo, siendo la santidad algo que no podemos entender pues a diario cometemos pecados, ya sea mentira, vanidad, envidia, lujuria, etc., en esencia todo lo que nos caracteriza en nuestra naturaleza pecaminosa es contrario a la perfección del Supremo, el Todopoderoso que creó el cielo, la tierra, los astros y toda la vida que nos rodea. Es lógico temer a Dios de manera reverencial, por todo lo que representa, lo que es y puede hacer, no hay nadie como Él, no tiene principio y no tiene fin, pues es eterno. Si no temes a Dios en admiración pura, es porque ignoras su inmenso poder y hermosa personalidad.
La sabiduría nace en tu corazón cuando la pides sinceramente a Dios, como dice la palabra; "Y si a alguno de ustedes le falta sabiduría, que se la pida a Dios, quien da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada." Revela el gran misterio de la vida: que vivir para mí y en mis propios intereses no satisface, mientras que vivir con Dios y para ÉL trae gozo, paz y vida en abundancia. Solo podemos acceder a ella a través de Cristo, “a fin de conocer el misterio de Dios el Padre, y de Cristo, en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento.”
Cuando hemos aceptado a Cristo, desciende a nuestros corazones, esta nos lleva a entender, respetar y practicar todos los conceptos del evangelio. El principio de la fe más importante es que Jesucristo es Dios encarnado, y de allí mana toda sabiduría y entendimiento.
Es así como la sabiduría se vuelve esencial en tu vida, con la inteligencia como preciada compañera.
La inteligencia es una virtud que se adquiere con la experiencia y el conocimiento en diversas cosas, juntas te ayudan a dar solución a múltiples problemas que pueden surgir en tu vida diaria. La inteligencia verdadera es alejarse del mal, conociendo los mandatos y la personalidad de Dios.
El mundo no busca que seamos sabios e inteligentes según la verdad revelada por el Creador. De hecho, busca siempre diferentes doctrinas que se desvían de la verdad o que tratan de excusar la existencia de Dios y la realidad de la Palabra. La Biblia advierte: “Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas,” Por ello, debemos ser muy cuidadosos sobre lo que vemos, escuchamos y nos dejemos influenciar.
De poco aprovecha ser sabio e inteligente en cosas mundanas si no tenemos el temor de Dios y el conocimiento del Altísimo, quien de verdad te otorga sabiduría e inteligencia espiritual y eterna. Si a medida que escalamos en nuestra vida profesional y en saber del mundo, nos dejamos llevar por la masa que no busca y rechaza a Dios, al final no veremos su bendición, y solo seremos muertos espirituales, viviendo una vida material llena de vanidades, placeres, reconocimientos vacuos, éxitos efímeros y vacíos objetos materiales, que se desvanecen ante la última mirada de nuestros ojos al morir.
"Lo principal es la sabiduría; adquiere sabiduría, y con todo lo que obtengas adquiere inteligencia."
Te invito a buscarla en las alas del Dios Todopoderoso Cristo Jesús, pide con sinceridad estas preciadas virtudes y te serán otorgadas, si en realidad tienes fe en Jesús y pides sin dudar. La lectura de la Biblia es una fuente inagotable de sabiduría e inteligencia, atrévete a beber el agua fresca del más dulce manantial que calma tu espíritu, lo instruye, reprende y purifica. Entonces jamás volverás a ser el mismo humano muerto en espíritu.
“Mejor es adquirir sabiduría que oro preciado; Y adquirir inteligencia vale más que la plata.”
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