martes, 31 de marzo de 2020

¿QUE ES EL AMOR?

El amor es el sentimiento más importante en el ser humano, sin duda el más valioso y la virtud más anhelada. Todos queremos ser amados. Pero muy pocos quieren amar de verdad, esta maravillosa virtud implica derrotar muchos defectos que se encuentran enraizados en lo profundo de nuestra alma y no es fácil cortarlos por amor a otra persona. Sin duda el verdadero amor tiene muchas virtudes, es bondadoso, paciente, humilde, honesto, justo, perseverante, empático, compasivo, sin dudar confía y perdona pero también es sabio e inteligente, sabe cuando alejarse de alguien que no lo ama.  Lo mas hermoso en esta vida es amar y ser amado.

El amor permanece constante a pesar de la oposición, el amor verdadero sin duda es para siempre, es eterno. No digas que conoces el amor o que amas si no estás dispuesto a permanecer amando a pesar de las circunstancias difíciles. El amor verdadero sufre al pasar diferentes eventualidades, al querer cambiar los defectos en la personalidad, al pasar momentos de carencia, enfermedad, etc., las soporta valientemente porque no pensaría en abandonar a su persona amada en tal o cual desgracia, sin duda el amor es sufrido. 

Si no deseas lo mejor para la persona amada, si no te gozas con su crecimiento y desarrollo, entonces no conoces la pureza del amor. El amor verdadero está lleno de bondad y no es envidioso, pues no está enfocado exclusivamente en su propia felicidad, sino en la bendición de la otra persona, la felicidad es compartir lo que tienes con la persona amada. 

El amor es humilde, no arrogante, no se envanece, no presume, ni usa su conocimiento, experiencias,  o cualquier otro recurso para imponerse sobre la persona amada.  No actúa como si fuese mejor, más sabio, más maduro o superior en algún sentido a la persona amada, no siente envidia de la persona que ama, por el contrario comparte todo lo que tiene y es, para ver brillar a su persona amada. Si no estás dispuesto a entregar todo de ti, entonces no puedes amar de verdad. 

El amor verdadero no humilla, no ofende, no hace nada indebido sino cuida, honra, protege a la otra persona. Si no eres capaz de cuidar el corazón de la persona que dices amar, entonces tu egoísmo te impide desarrollar tu capacidad de amar. No pienses que el amar a una persona significa que ella tiene que tolerar cualquier egoísmo o maldad de tu corazón. El amor sincero es empático y compasivo, sabe ponerse en el lugar del otro y entiende que le podría causar dolor a su ser amado, por lo tanto se detiene y reflexiona para no causar daño. 

El amor verdadero no se irrita con facilidad, no pierde la paciencia rápidamente, entiende que todos están propensos a fallar y tienen muchos defectos, por lo tanto esta dispuesto ayudar a cambiarlos por virtudes. No te equivoques: si no puedes soportar pacientemente los errores de la persona que amas, y no lo quieres ayudar a cambiar entonces no la amas. 

El amor verdadero no guarda rencor, no guarda un registro de las ofensas recibidas, sino que perdona completamente. Perdona porque ama, entiende que también tiene muchos fallos y es capaz de mirar las virtudes y fortalezas que pueden desarrollar y así cubrir sus errores. No guardes la cuenta de las ofensas que has recibido de la persona que dices amar. Si no eres capaz de perdonar y restaurar la relación, si siempre guardas recelos, temores, desconfianza, entonces no estás dispuesto amar verdaderamente. 

El amor verdadero se goza en la verdad, no en la maldad e injusticia. Busca un crecimiento, tiene un propósito. Es de bendición para que la persona crezca. No te confundas pensando que el amor es solo un sentimiento bonito para pasar el momento. 

El amor confía y en esa confianza todo lo cree. No hay confianza sin conocimiento ni comunicación.  Te embarcaras en el proceso de conocerla profundamente, sin horrorizarte ni espantarte, ni impacientarte por lo que encuentres. No pierdas de vista que tú también tienes innumerables defectos, eres débil, frágil y necesitado. Te comunicaras con esa persona, sin asumir cosas, sin pensar por la otra persona. El amor verdadero confía, cree y se expresa. 

El amor verdadero es capaz de esperar el tiempo que sea necesario. El tiempo es una de las mayores pruebas para el amor. La impaciencia, es evidencias de un amor distorsionado, egoísta que quiere a la persona solo por las sensaciones que puede producirme su cercanía, no por amor verdadero a ella. El amor verdadero sabe esperar. 

El amor verdadero es capaz de soportarlo todo con valor. Enfermedades, problemas, pobreza, defectos, conflictos, debilidades, pecados, etc. El amor verdadero no se basa en las emociones, sino en el cimiento estable de un carácter virtuoso. 

Sin duda ahora puedes entender que amar no es fácil requiere de mucho esfuerzo en virtud y entrega, ahora podrías comprender que el amor todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. 

No confundas una pasión de fin de semana con el amor verdadero. No compares el simple deseo sexual, la codicia por el cuerpo de una mujer, el romanticismo barato de las películas de Hollywood con el sublime, puro y verdadero amor. No pienses tampoco que nacemos sabiendo amar: para nada, aprendemos amar con esfuerzo constante. 

El amor verdadero no es solamente pasión, romance, mariposas y felicidad. Este se fortalece en momentos críticos y se coloca entre la persona amada y las situaciones difíciles para protegerla. ¿Amas a una persona? Entonces vas a proteger su corazón, su vida y vas a hacer todo lo posible por cuidarla. No te rindes por la persona amada, sino que peleas y luchas por su amor. 

Muchas veces preferimos escondernos bajo nuestra coraza de temor y egoísmo antes de arriesgarnos a amar a una persona imperfecta y pecadora como nosotros. Otros preferirán las orillas del amor, contentándose con el romanticismo, pero sin profundizar a un compromiso mayor, porque piensan que luego podrían encontrar a alguien mejor. Algunos no se arriesgan a amar por temor a salir heridos, a ser rechazados, a ser engañados. Otros sin duda les agrada la dulzura de las primeras citas pero cuando empiezan a conocerse a profundidad salen disparados terminando la relación por ser incapaces de ayudarse mutuamente a superar sus terribles defectos. Algunos mas viven juntos sin amarse de verdad, por comodidad, rutina, miedo, dinero, los hijos, etc., y nunca se atreven amar de verdad.  El verdadero amor echa fuera el temor, la desconfianza, la duda y la incredulidad. Ahora cuestiónate ¿tu sabes amar? ¿Estas amando a tu pareja verdaderamente? ¿Deseas amar verdaderamente con entrega y darlo todo hasta el último día de tu vida? 

El amor más puro y sublime, proviene de Cristo Jesús nuestro Dios y salvador ese es el ejemplo perfecto de amor verdadero. 

El amor de Cristo se expresó en el sacrificio que hizo en la cruz, derramo toda su sangre divina y entrego su vida para salvarnos de la esclavitud del pecado. Nos liberó, nos redimió y nos perdonó todos nuestros pecados, los del pasado, presente y futuro, aun de los humanos que no han nacido. Su amor sin duda cubre multitud de pecados y es eterno e inagotable. 

Él consideró nuestra necesidad de un Salvador, como más importante que Su propia vida y comodidad, ese acto tan sublime muestra toda su bondad, misericordia, humildad, y valentía. 

Siendo Dios por naturaleza, existió desde el principio de los tiempos con Dios el Padre y el Espíritu Santo, Él dejó voluntariamente Su trono para hacerse hombre, y así poder pagar el castigo por nuestros pecados, para que no tuviéramos que pagarlo nosotros por toda la eternidad en el lago de fuego. Porque el pecado de la humanidad ha sido pagado por nuestro Salvador Jesucristo, quien jamás pecó, Dios, quien es justo y santo, puede ahora perdonar nuestros pecados cuando aceptamos el pago de Jesucristo como nuestro. Por tanto, el amor de Cristo es mostrado al haber dejado Su hogar en el cielo, donde era adorado y honrado como Él merece, para venir al mundo en forma de hombre, donde Él sería ridiculizado, traicionado, golpeado, y crucificado en una cruz para pagar el castigo por nuestro pecado, resucitando nuevamente de los muertos al tercer día. Porque no estimo su deidad como cosa a la cual aferrarse se hizo hombre por amor a la humanidad y entrego su hermosa vida para así salvarnos. 

El amor de Cristo se extiende hasta aquellos que son los más indignos. Él voluntariamente llevó el castigo de aquellos que lo torturaron, lo odiaron y se revelaron en su contra, a quienes Él no les importaba, aquellos que eran los más indignos de su amor. Él dio todo lo que podía dar por aquellos que menos lo merecían. Entonces, el sacrificio es la esencia del amor santo, así es el amor de Dios, no es un amor como el de los seres humanos, que solo es egoísta y busca su propio beneficio, amándose a el mismo antes que a otros, no le importa sacrificar nada, ni hacer nada en beneficio de otros sin esperar algo a cambio, así es el hombre que ama sin conocer a Dios. 

Este amor que Él demostró por nosotros en la cruz es sólo el principio. Cuando ponemos nuestra confianza en Él como nuestro Salvador. Él nos hace hijos de Dios, y co-herederos con Él. Él viene a morar dentro de nosotros a través de Su Espíritu Santo, prometiendo que nunca nos dejará ni nos desamparará. Por tanto, tenemos a un amado compañero de por vida. Y sin importar por lo que pasemos, Él está ahí, y Su amor está siempre disponible para nosotros. Pero así como Él reina legítimamente como un Rey benevolente en el cielo, necesitamos darle la posición que Él merece también en nuestras vidas, la de Maestro y no solamente de compañero. Es solo entonces, cuando experimentaremos la vida que Él quiso que viviéramos en su amor y voluntad. 

El mayor acto de amor es entregar tu vida para salvar la de otro. Cristo, Dios encarnado, entregó la suya para salvar a toda la humanidad y nos otorgo vida eterna, salvándonos de ir al fuego eterno. Lo único que tienes que hacer para recibir el amor de Jesús es creer en Él. 

El amor no busca su propio beneficio. Encuentra gozo en ver que la otra persona es bendecida, crece, madura, avanza. Si no eres capaz de permanecer en oración  por la persona amada, entonces te estas perdiendo de la ayuda y guía de Dios quien te enseña amar. En la Biblia encontrarás muchos ejemplos y consejos sobre lo que es  el amor y lo que no es amor.  El que ama de verdad no busca solamente su propia satisfacción, felicidad, comodidad y deseo. El amor verdadero se entrega por la otra persona y hace sacrificios en su vida y personalidad.

Todos necesitamos aprender amar, ninguno nace con esta virtud desarrollada, a lo largo de la vida adquieres valores y tomas ejemplos de como amar, talvez los primeros ejemplos son tus padres, hermanos, amigos y medios de comunicación  pero si de verdad quieres amar toma el ejemplo de Cristo y empieza por amarlo a ÉL,  sin duda tu seras amado y encontrarás quien te ame de verdad.


EL SENTIDO COMUN Y EL DISCERNIMIENTO ESPIRITUAL

Las masas contemplan embelesadas los grandes espectáculos, se pierden en la mundana y efímera adoración temporal de un artista o deportista, por unos minutos nada es mas importante que aquel espectáculo por el que se ha pagado un precio. Ese ritual sin sentido ahora es visto desde la lejanía con añoranza, casi con lagrimas en los ojos, pues no se puede ser un fanático idolatra de algún humano igual de pasajero que cualquiera, ahora que el encierro es obligatorio por el invisible gobierno mundial. Esto es una normalidad, incluso un lujo del que unos presumen y otros envidian. Pero hablar de las evidentes conspiraciones de la realidad, los lazos de grupos bien reconocidos en los supuestos "lideres y famosos", y las burlas a la inteligencia por parte de grupillos como la nasa, que explica los fenómenos en el cielo como "cielomotos", hablar de estos temas te hace un raro, conspiranoico, o alguna idiota etiqueta de la normalidad adormecida. ¿Donde esta el criterio sobre lo que es o no importante en la vida? 

Si miramos a nuestro alrededor podemos observar que muchas personas abandonaron el sentido común, están sumergidos en sus propios deseos y pensamientos, no quieren mirar lo insensato, tonto y necio que resulta aferrarse a cierta acción. Como por ejemplo el bañarse en una fuga de gasolina cuando claramente se puede morir quemado, pero donde es más grande el deseo de obtener dicha gasolina, hasta el punto en que se nubla la razón; o cuando se aferran a operarse para parecer una mujer, pero su esqueleto, genitales, ADN y fisiología dictan que es un hombre, o viceversa. Así se puede llegar a una innumerable lista que tristemente crece cada día y lo más aterrador es que estas locuras cuentan con apoyo gubernamental, legislativo y económico. Sin duda poco importa el sentido común. 

El sentido común es aquello que en las circunstancias de peligro puede ayudar a cualquier persona para salvaguardar su integridad y su vida. Eso que consideramos básico y evidente, conclusiones a las que llegamos casi automáticamente al tratar de analizar lo que percibimos, es algo que parece estar ausente en muchas partes del mundo últimamente. Pareciera que el sentido común ha abandonado este lugar y nos ha dejado a nuestra suerte,cuando entramos a este mundo con la idea de privilegiar mas los deseos de la mente y el cuerpo, poniendo en primer lugar algún objeto ante cualquier otro aspecto espiritual. 

Lo más importante es que nos permite manejarnos en las más variadas situaciones con prudencia y sensatez. Nos ayuda a saber qué es más adecuado decir o hacer en determinadas situaciones. Se compone de juicios razonables o conclusiones prácticas, sin complicaciones, que permiten dotar de sentido o lógica cualquier evento o hecho de nuestra vida cotidiana. Como tal, surge espontáneamente en nuestro día a día, bien sea a partir de vivencias personales, bien de experiencias compartidas. 

Por sentido común se hacen o dejan de hacer muchas cosas, por ejemplo se evita caminar de noche por los lugares más peligrosos de una ciudad; nos abrigamos si hace frío o evitamos mojarnos si llueve, entre otras muchas cosas. 

Dios te diseñó teniendo un propósito en su mente; Dios te ama y tiene un destino específico, único y glorioso para ti y Él promete guiarte. El propósito de Dios para ti es más grande que tus fallos. Yo he cometido muchos errores en mi vida, pero Dios no ha dejado de guiarme. 

Dios quiere comunicarse contigo y ha prometido guiarte. Una de las formas es atraves del sentido común que sin duda evitara que cometas muchos errores en tu vida. "Al que es honrado, él le concede el tesoro del sentido común. Él es un escudo para los que caminan con integridad. Él cuida las sendas de los justos y protege a los que le son fieles. Entonces comprenderás lo que es correcto, justo e imparcial y encontrarás el buen camino que debes seguir." 

Así como el sentido común es importante existe una gran necesidad de poseer discernimiento espiritual para la vida diaria. Sin la capacidad de discernir no podemos caminar sabiamente. 

El discernimiento es la habilidad para diferenciar la verdad del error, alguien con la habilidad de discernir pudiera ver cosas en una circunstancia, o en la lectura de la Biblia, que quizás otros no pudieran ver tan claramente. EL discernimiento espiritual “es la capacidad dada por el Espíritu Santo de ver la vida a través de la revelación de Dios”. 

Dios quiere que todos los seres humanos tengan la capacidad de discernir las cosas espirituales para que no tengan un espíritu muerto y seco. “Por eso va cautivo mi pueblo por falta de discernimiento; sus notables están muertos de hambre y su multitud reseca de sed”. 

Hablar de discernimiento espiritual es sin duda hablar de las realidades invisibles para nuestros ojos pero no para nuestra mente, es un conocimiento íntimo que nos hace distinguir y diferenciar qué viene del Espíritu de Dios, qué viene del espíritu maligno y qué viene de nuestro propio espíritu humano. Por ello el discernimiento nos llevará a descubrir que nuestra experiencia espiritual puede venir, y de hecho viene, de “diferentes espíritus”. 

El espíritu humano no solo es perceptivo, sino también es el lugar donde mora el Espíritu Santo. Por esta razón las capacidades perceptivas son más potentes en un creyente que las de un incrédulo. Dios es la voz de nuestro discernimiento y el nos habla desde su espíritu. El mundo se burla y rechaza a Cristo por lo tanto no tienen una relación con Dios para que los guie, por eso muchas personas en el mundo defienden lo malo y piensan que es algo normal, pueden percibir lo malo pero no pueden discernirlo. 


El espíritu humano tiene capacidad para percibir el ámbito espiritual, sin embargo, los incrédulos, aun sin el Espíritu Santo tienen cierto grado de sensibilidad hacia el ámbito espiritual. 

El ser humano es perceptivo a lo espiritual, por esta razón los brujos y los médiums pueden contactarse al mundo espiritual por medio de su espíritu. Cuando lo hacen, como no tienen al Espíritu Santo se contactan con demonios. Sin embargo los creyentes en Cristo pueden establecer una relación con Dios mediante el Espíritu Santo quien lo capacita constantemente en toda virtud dependiendo del grado de entrega, esfuerzo y fe. 

Uno de los frutos del discernimiento espiritual es la capacidad para caminar con sabiduría y a la vez caminar en integridad de corazón. Sin embargo, es una cualidad desarrollada sólo para los que han aceptado sinceramente y sin dudar a Cristo como su Dios y Salvador, puesto que sólo es posible en aquellos en quienes mora el Espíritu Santo y solo mora en los que tienen fe verdadera en Jesús. 

Cuando yo discierno algo, tengo que considerarlo, tengo que percibir lo que está detrás de lo que he considerado y tengo que ser prudente al actuar. Esa capacidad me permite ver más allá de las apariencias y saber que espíritu o que motivación del corazón se encuentra detrás de personas y situaciones. Con esta destreza puedo comprender y aplicar la Palabra de Dios con el propósito de separar la verdad del error y lo bueno de lo malo. Con esta acción se busca distinguir, diferenciar, entre dos cosas que por lo general se nos aparecen como buenas. Nos permitirá también decidir un curso de acción, juzgar a la hora de tener que pasar un juicio sobre algo o sobre alguien. Todo esto es parte de lo que la palabra de Dios llama discernimiento y que debiera caracterizar a todo cristiano. 

El discernimiento nos debe llevar a realizar juicios correctos. La Biblia dice juzguemos con justo juicio. El discernimiento nos ayuda a reconocer la voz de Dios. Debemos determinar cuando Dios nos está hablando. La Escritura dice que el Señor es nuestro Pastor y que como ovejas suyas debemos reconocer su voz. Dios nunca nos va hablar algo contrario a su Palabra, debes saber que no es una voz audible la forma en que Dios se puede comunicar contigo es atraves de tu sentido común, el discernimiento espiritual, sabiduría, tu lectura diaria de la Biblia, en oración, en ayuno, atraves de las personas que comparten la Palabra y con tus virtudes. 

Las cosas espirituales solo pueden ser discernidas espiritualmente. Nosotros vemos según quienes somos. El hombre natural solo percibe lo natural y el hombre espiritual puede percibir lo espiritual.

El espíritu humano también podría ser perceptivo al recibir información natural que le dan sentido de cosas que pudieran estar sucediendo en lo espiritual. Por ejemplo si conoce a alguien que está atado a las drogas y no puede superar su adicción, es fácil percibir que esa persona está atada o esclavizada a un espíritu de adicción o esclavitud. 

Vemos esa clase de percepción en la mujer samaritana, a ella le pareció que Jesús era profeta Su percepción vino de observar que el Señor actuaba como un profeta, pero a la vez su percepción natural la ayudo a recibir la revelación de que Jesús era el Mesías. El Espíritu Santo agrego revelación divina a su percepción natural, puesto que cuando termino su conversación con el Señor ya no lo sigue llamando profeta sino Cristo el Mesías. 

El Espíritu Santo puede usar lo que vemos o percibimos para traer revelación espiritual o inspiración divina. La percepción espiritual es diferente al discernimiento espiritual. Los no salvos y los brujos operan más en la percepción pero no en el discernimiento. La percepción tiene la capacidad de ver algo y por media de ella se sabe que hay algo allí, mientras que el discernimiento nos ayuda a conocer su origen y a responder correctamente a lo que hemos visto, separa lo bueno de lo malo y nos da dirección. La percepción y el discernimiento obran juntos. En este pasaje donde dice: “…tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.” . La palabra "sentidos" aquí habla de percepción. Este versículo nos quiere decir que toda clase de percepción en la que operamos necesita ser entrenada en el discernimiento. La palabra discernir en este versículo significa juzgar o llegar a una conclusión. No podemos detenernos en la percepción, necesitamos ir a la parte siguiente y es la habilidad del Espíritu Santo para analizar la información recibida y sacar una conclusión correcta. 

Es así como podemos entender que no somos simples seres humanos somos seres espirituales viviendo una vida material, pero todas nuestras grandes habilidades están desperdiciadas y mal enfocadas con un espíritu muerto y seco, la única forma en que cobre vida es aceptando a Cristo como tu Dios y Salvador, de esta manera recibirás al gran maestro que habitara en tu cuerpo, el Espíritu Santo, poderoso guía que te instruirá en todas las cosas espirituales, te ayudara en todo lo que te propongas y establecerás un relación con Dios en amor, respeto, humildad y adoración constante.

No te sumerjas en lo cotidiano y material, reclama tu derecho divino de ser salvo por medio del sacrificio de Cristo, toma tu vida eterna y el poder indestructible de la fe. Cree en esa realidad espiritual que perciben tus sentidos pero que no alcanzas a entender y únete a los guerreros de luz que ya son victoriosos en la cruz de Jesús. Toda tu realidad cambiara por una constante guía de Dios, que será lámpara a tus pies, fortaleza y descanso seguro. Si Dios contigo nadie contra ti. Aduéñate de todas las promesas que Dios hizo a su pueblo que le ama, obedece, respeta, honra, adora, admira, teme y agradece con eterna humildad.


¿EL MIEDO TE PARALIZA, TE SOMETE O TE HACE ACTUAR?

En estos días de crisis mundial, donde la incertidumbre habita en la mente de las personas, es cuando se puede analizar mas sobre el miedo. En los seres vivos el temor primordial es el de encontrar la muerte. La idea de ser detenido abruptamente en este transitar en la tierra es una idea que pocas veces se contempla, a no ser por la enfermedad o algún accidente, sin embargo ahora es una cuestión que esta latente en el pensamiento colectivo. En realidad siempre lo debería de estar, sin embargo ahora contemplamos la razón del por que no lo esta; el miedo a morir es capaz de paralizar sociedades enteras, y llevar a los individuos a un estado de intranquilidad constante. Aun mas en este triste mundo relativista, donde la muerte es el inminente destino y solo hay dudas sobre la inexistencia total o un posible proceso transitorio. Para el ateo la muerte es el final, con un destino similar al abono. Finalmente ante la idea de una pandemia mortal y paralizante, las personas confrontan sus propias personalidades con estos asuntos fundamentales. ¿Es que este puede ser el fin? ¿Ya nada volverá a ser igual? ¿Entregaremos nuestras libertades en pos de una tranquilidad artificial en forma de vacuna?

Cuando tenemos miedo respondemos de tres formas; nos paralizamos, nos sometemos o actuamos para escapar o defendernos. Cada ser humano responderá en base a su personalidad y eso determina la forma en que afrontara las diversas situaciones en su vida, con sus responsabilidades y consecuencias.

El miedo es un sentimiento que puede ser abrumador, que además puede convertirse en autentico pánico o terror, llevando a los limites de la mente humana, que muestra las emociones más negativas en los corazones; desde el egoísmo desmedido, porque solo se piensa en salvaguardar la integridad, usando la violencia física o verbal, sin importar que pueda lastimar a personas más necesitadas o débiles, hasta el punto de llegar a una locura homicida que entra en la mente e impide razonar con claridad, porque es tanto el miedo de perder la vida, que no interesa escuchar o entender algún motivo o razonar.

Sin duda es un arma muy poderosa, que puede ser utilizada por cualquiera para someter y lograr lo que se desea. Mientras más poder y conocimientos tenga alguna persona, más elaborado y complejo será la forma en que desea transmitir el miedo para lograr un fin determinado. Ante el miedo, la persona que eligió someterse tendrá obediencia ciega hacia la autoridad a la que se subordinó, así que cualquier acción que esta decida hacer es aceptada por la persona sumisa, aunque viva en tensión y desconfianza, pues su deseo de vivir es mas fuerte, sin importar si esto significa perder su libertad e integridad física o mental.

Vivimos en un mundo repleto de mentiras, donde el miedo y la violencia son armas perfectas para controlar al ser humano, donde siempre han sido respaldados por medios masivos de información. Estos últimos se convierten en una especie de alarmistas informativos, al repetir amenazas constante y tenazmente, tanto que la sociedad termina aceptándolas y creyéndolas, y eso es justamente lo que las hace funcionales. Ante el terror de los humanos, el sistema que mantiene este mundo, tiene la oportunidad de crear las condiciones de culpabilidad, chantaje emocional y sumisión, para así desplegar todo su poder en aras de combatir ese mal que la sociedad ahora reclama eliminar. Pero a su vez impone un precio sutil y perverso, busca legitimar sus acciones aprovechando el caos surgido del miedo social provocado. Un plan que formuló y ahora propone soluciones, imponiendo nuevos cambios que no podría establecer sin dicha crisis, en dado caso siempre son acciones que limitan la libertad, aumentan la pobreza de unos y la riqueza de otros, manteniendo al humano más controlado y vigilado.

Es así como el miedo hace que las personas no reaccionen y no sigan adelante con sus ideas o reivindicaciones. Generalmente cuando el sistema del mundo utiliza la política del miedo empieza dando un golpe fuerte de primera instancia, dejando en shock y adormeciendo a la población, luego cuando determinan políticas económicas o sociales estrictas, dejan a las personas con una sensación de consuelo y conformismo, incluso gratitud, por que al menos se les salvó la vida. 

Cuando el miedo cercena la racionalidad de la sociedad el sistema recibe una carta en blanco para escribir en la mente de los seres humanos una respuesta favorable a sus políticas, y cuenta con el pretexto ideal para sacar de sus cuarteles a la fuerza militar y pública, socavando o previniendo cualquier intento de protesta social que amenace sus intereses o los de sus protegidos. Sin suda es un plan maestro y más aun si usan la ciencia, porque nadie cuestionaría a los nuevos sacerdotes de bata blanca. "Seguramente si es un científico con tres doctorados, es incapaz de mentir o ser utilizado para llevar a cabo un determinado plan, sin duda son santos que no pueden mentir, incorruptibles, inmaculados..." es el pensamiento de las masas que sienten no pueden opinar de tal o cual tema por no tener las "credenciales".

Al usar la premisa “la ciencia dice" o "lo dice tal científico" inmediatamente se convierte en una verdad absoluta que no se puede cuestionar o contradecir, y la gente lo acepta sin más, por lo tanto, el miedo transmitido por esos medios se vuelve casi blindado ante cualquier cuestionamiento, debido a que la gente ha perdido su capacidad para observar, estudiar, investigar, analizar y reflexionar. El ser ignorantes en ciertas ramas no formula leyes para no cuestionar a los científicos. El sentido común, el discernimiento, la curiosidad y el buen juicio son virtudes del ser humano que le dan armas para cuestionar, dudar y aprender constantemente.

Sin embargo el miedo no es solo para someter a débiles e ignorantes, también los estudiados dueños de conocimiento se someten cuando ven en peligro su vida y sin duda también están dispuestos a renunciar a sus libertades a cambio de permanecer con la misma.

El miedo obstaculiza la tranquilidad emocional de quienes lo sienten y son muchos sus efectos paralizantes; inseguridad, pánico, espíritu coartado y libertad sitiada. Con el miedo se bloquean las capacidades analíticas de los humanos, llevándolos a un estado de paranoia que las hace abandonar la sensibilidad humana, convirtiéndose en indiferentes ante los vejámenes y abusos que se cometen en aras de preservar la seguridad. La cultura del miedo solo ha sido el instrumento por excelencia para la dominación de los pueblos, garantizando el control social de los grupos que pueden enfrentarse entre ellos por el pánico.

El ser humano tiene una gran capacidad mental pero es limitada por sus propios deseos materiales, la mente nunca deja de aprender, aun de viejos podemos seguir comprendiendo nuestro entorno y a nosotros mismos. El miedo no puede limitarte, solamente lo logra si tú deseas que así sea.

Hoy en día muchos viven con temor. Sin embargo, la Biblia nos enseña que Dios está en control de todo. No podemos permitir que el miedo controle nuestras vidas. Aprende a vivir por fe y no por temor.

La Palabra de Dios nos dice "no temas porque Yo, tu Dios, estoy contigo" esto es expresado en muchas maneras a través de la Biblia. Dios no quiere que temamos, porque el temor nos impide recibir y hacer todas las cosas que Él ha planificado para nosotros. Él nos ama, quiere bendecirnos y ha provisto maneras para que no sintamos temor.

Cuando el miedo o la duda nos hacen evitar la confrontación de algún asunto en nuestra vida, lo que debemos hacer es orar y pedirle a Dios que haga por nosotros lo que Él ha prometido en su Palabra, ir delante de nosotros y pavimentar el camino. “Yo iré delante de ti y allanaré los lugares escabrosos; romperé las puertas de bronce y haré pedazos sus barras de hierro.” Jesús nos dice que pidamos en oración y nos será otorgado pero "tienen que pedir con fe y sin dudar porque el que duda es como una ola del mar, que el viento lleva de un lado a otro."

Dios ha prometido fortalecernos, endurecernos en contra de las dificultades, sostenernos y mantenernos firmes con su victoriosa mano derecha. También Él nos ordena a no tener miedo. Pero se debe recordar, Él no nos pide que nunca sintamos temor, pero sí nos pide que nunca le demos el control de nuestra vida al temor. El Señor nos dice que no mires a tu alrededor con terror, ni desmayes, porque Él es tu Dios. "No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia."

Tenemos que combatir el miedo en nuestra vida identificando la causa del problema, actuando en base a la mejor solución posible después de analizar, reflexionar y contar con la mejor ayuda disponible, con la lectura de la Palabra de Dios, meditación en la misma, con una fe firme en Cristo y oración diaria. Estas son la clave para un total éxito sobre el miedo.

Una de las promesas de Dios es que nuestro amor por Jesús, moverá el miedo por completo de nuestras vidas. "No hay temor en el amor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor"

Jesús dijo "No tengas miedo, solamente ten fe" esa fe es la que hace que nos levantemos ante cualquier circunstancia porque nos sentimos amados, protegidos y fortalecidos por Dios. Jesús nos recuerda que Dios se preocupa por las aves del cielo, así que, ¿cuánto más proveerá para Sus hijos? “Así que no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos” Dios nos dice que no temamos estar solos, o estar demasiado débiles, o no ser escuchados, y no temer por nuestras necesidades físicas. Y estas exhortaciones continúan a través de la Biblia, cubriendo los diferentes aspectos del “espíritu de temor”.

El salmista escribe, “En Dios he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre?”. Este es un asombroso testimonio de fe en Dios. Lo que el salmista está diciendo es que, a pesar de lo que suceda, él confiará en Dios porque conoce y entiende Su poder. Entonces, la total y completa confianza en el Creador es la clave para vencer el temor.

Confiar en Dios es rehusarse a ceder ante el temor. Es acudir a Dios aún en los tiempos más oscuros y confiar en que Él arregle las cosas. Esta confianza procede de conocerle y saber que Él es un Dios bueno. Como dijo Job cuando estaba experimentando unas de las pruebas más difíciles registradas en la Biblia, “He aquí, aunque él me matare, en él esperaré” 

Una vez que hayamos aprendido a poner nuestra confianza en Dios, ya no tendremos temor de las cosas que vengan contra nosotros. Seremos como el salmista que con fe dijo: “…alégrense todos los que en Ti confían. Den voces de júbilo para siempre, porque Tú los defiendes. En Ti se regocijen los que aman Tu nombre” 

La obra de Cristo en tu vida es mayor a la historia que tu pudieses imaginar. Su obra es mayor que tus planes, objetivos o temores. Para salvar la vida, tendrás que dejar de lado tu historia y día a día, regresarle tu vida a Él. Con cuánta constancia entregó Jesús Su vida al Padre, con cuánta perfección perdió Su vida para hacer la voluntad del Padre; en la vida como en la muerte. Es precisamente lo opuesto a la actitud y el método de Satanás, tan extendidamente adoptado por el mundo egoísta en el que vivimos.

El mandamiento de Cristo de seguirle es rechazar una y otra vez el modelo satánico y perder nuestra vida en aras de la vida real, de la vida auténtica,  la que nos posibilita el reino celestial que Dios desea para cada uno de nosotros. Dicha vida bendecirá a todas las personas con las que entremos en contacto. “para mí, el vivir es Cristo y el morir ganancia”, el Apóstol Pablo quería decir que era indiferente a cualquier situación, ya sea que viva o muera, porque, teniendo a Cristo, considera que ambos son ganancia. Porque al tener fe en Cristo lo tienes todo, es tu escudo, fortaleza y descanso, tú guía, ayudador y luz que ilumina el sendero. No hay mas temor en tu vida, porque está en la manos de Jesús "y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”

La fe en Cristo es el escudo más efectivo contra el miedo. "Porque Dios no nos ha dado un espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio." Por lo tanto levanta tu mirada al cielo y pide a Dios por fe, valor y sabiduría para afrontar todos los miedos que quieran derrotarte. Es tiempo de rendirte a los pies de Cristo y cambiar tu vida para siempre, arrodíllate y junta tus manos en oración , con un corazón humilde, agradecido, sincero y arrepentido, esperanzado en la ayuda que Dios puede ofrecerte.

Clama a Cristo por su auxilio, esa es la fe que puede salir cada día de tu alma hasta que dejes esta tierra.












LAS VIRTUDES: EL TESORO MAS VALIOSO DEL SER HUMANO

Hoy en día no se piensa mucho en las virtudes, no se reflexiona sobre la gran necesidad que hay de ellas. Muchas personas no pueden definir y mucho menos comprender su significado, muy pocos han desarrollado sus virtudes como algo cotidiano en su vida diaria. En casos más extremos las personas han dejado de creer en ellas como si fueran algo inalcanzable, como es el caso del amor y el perdón. Lamentablemente se tiene una gran dificultad para mencionarlas, pero sin duda son como hermosas joyas que adornan el espíritu del ser humano.

Las virtudes humanas son actos moralmente buenos que controlan las pasiones y guían la conducta en conformidad con la razón y la fe. Son adquiridas y fortalecidas por medio de reiteradas acciones de bondad. Las virtudes son los dones más preciosos que Dios depositó en nuestra alma, cada ser humano nace con virtudes y dependiendo de sus acciones se desarrollan a lo largo de su vida. Es importante conocerlas y entender su significado, porque ellas son las que determinan el valor de cada ser humano como un ser espiritual. Sin embargo desarrollarlas no es fácil hay que derrotar nuestra naturaleza egoísta la cual se opone a la virtud, todos los humanos tienen la libre decisión de rechazarlas o hacerlas crecer. 

Todo es cuestión de elegir, eliges la virtud o eliges el pecado. Por ejemplo, quien elige ser bondadoso es libre ante las atracciones de la ambición. Por el contrario, quien elige ser  egoísta, se hace esclavo de los impulsos de la avaricia. 

El hombre virtuoso es una persona verdaderamente libre.  Por ejemplo el alcohólico no es una persona libre para elegir en materia de alcohol, es una persona encadenada y la virtud es la solución, ejerciendo virtudes como fuerza de voluntad, confianza, autoestima y aceptación entre otras podría cambiar su vida . El que rechaza la virtud es esclavo de sus pecados, del placer que generan cualquiera que estos sean. La virtud es un hábito bueno que hace al hombre capaz de hacer el bien de un modo fácil y gratificante. 

Existen virtudes adquiridas, las que se adquieren con nuestro esfuerzo a través de la repetición de acciones buenas, y existen virtudes recibidas como don de Dios; fe, sabiduría, libertad, paz y amor. No obtenemos la fe por nuestras propias fuerzas. Le pedimos al Señor que nos ayude en nuestra falta de fe, que nos aumente la fe, porque Jesús, es el inicio de nuestra fe y es también Él quien la lleva a cumplimiento. Quien pide la fe la obtiene, porque ese deseo de tener fe, es ya, un acto de fe. Si Dios es el origen del amor, cuanto más buscamos conocerlo, más capacitados vamos a estar para amar. 

El temor a Dios es el principio de la sabiduría y solo Él puede otorgarla pues la da a todos sin limitación y sin hacer reproche alguno si la pides con sinceridad te es otorgada. La paz que Dios te da nadie te la pueda dar, nos dejo su paz, nos da su paz, si la pides con fe sincera, la obtendrás  y nada de lo que existe en el mundo la podrá igualar. 

Sin las virtudes, el hombre puede hacer buenas acciones, si quiere, pero la mayoría de las veces  lo hace por obligación, de mala gana y con esfuerzos, por lo cual no puede ser constante en el bien porque no tiene ese hábito grabado en su mente y corazón, su espíritu carece del gozo que solo la virtud puede dar para impulsar esa buena acción. 

Es necesario comprender que una virtud es una disposición habitual y firme para hacer el bien. El fin de una vida virtuosa consiste en llegar a ser semejante a Cristo. 

Analicemos las siguientes virtudes y piensa cuántas te faltan por desarrollar. 


Responsabilidad: Es la voluntad de asumir las consecuencias de nuestras elecciones. Es un acto de madurez y obligación moral o legal del cumplimiento de nuestros deberes, que implica esfuerzos por parte de uno mismo. 

Gratitud: Es el reconocimiento y el aprecio de las cosas, acciones y palabras que tenemos o nos han otorgado. Hace que valoremos desde las cosas más simples hasta nuestra propia existencia. 

Asertividad: Es la expresión de la propia opinión de un modo correcto y respetando los derechos de los demás 


Respeto: Es la consideración con que se trata a una persona por alguna cualidad, situación o circunstancia que las determina y que lleva a acatar lo que dice para no causarle ofensa o perjuicio. Es la admiración que se siente por una persona la cual nos lleva a tratarlo con cuidado. 


Servicio: El cuidar a las personas, escuchando con compasión, ayudando con bondad en base a nuestras capacidades. 

Prudencia: Es la mesura que nos impide comportarnos de manera irreflexiva e impulsiva en las múltiples situaciones que debemos sortear en la vida. Un individuo precavido es cauteloso, porque entiende el sentido que tiene su vida y la de otras personas. 

Generosidad: Es el hábito de compartir con los demás y de cuidar sus necesidades. 

Orden: Es la capacidad de mantener organizados y limpios, nuestros espacios, objetos, y pensamientos. 

Compromiso: Es la voluntad para mantener nuestras promesas y dar todo nuestro esfuerzo a largo plazo. 

Compasión: Es la profunda empatía por el sufrimiento de los demás. Es la misericordia que conmueve nuestro corazón para ayudar cuando alguien está en dificultades 

Confianza: Es la sensación de seguridad y la valoración de las capacidades que tenemos nosotros mismos y las personas que nos rodean. 

Cooperación: Trabajar junto a otra persona por un objetivo común. . 

Sentido del humor: La habilidad para interpretar el mundo que nos rodea con una mirada alegre. Es la capacidad para detectar en cualquier situación los rasgos de comicidad que se desprenden de ella y utilizarlos para reinterpretar los hechos de una forma más desenfadada. 

Valentía: Una cualidad que permite enfrentar el peligro sin mostrar miedo y transforma este miedo en determinación, logrando superar las adversidades. 

Creatividad: La capacidad para generar ideas nuevas, crear e inventar algo. 

Empatía: La capacidad de ponerse en el lugar del otro, de entender sus emociones y su comportamiento. 

Decisión: La capacidad de elegir con firmeza de mente para tomar una posición y así llegar a una conclusión. Requiere valor y discernimiento. 

Perseverancia: Es la habilidad para nunca darte por vencido a pesar de las adversidades. 

Devoción: Un servicio incondicional al propósito de nuestra vida. Entregarse por completo a lo que uno ama. 

Dignidad: Es honrar el valor de todas las personas, incluyendo a nosotros mismos y tratar a todos con respeto. 

Integridad: Es la entereza moral para hacer lo que se considera correcto para uno mismo y para los demás de acuerdo con sus principios sin importar las circunstancias. 

Paciencia: Es la capacidad para resistir las pruebas y soportar los momentos difíciles o prolongados sin perder la calma. 

Autocontrol: Es la capacidad para regular las emociones y el comportamiento a pesar de las adversidades 

Entusiasmo: Es afrontar la vida con una mentalidad positiva y con una exaltación del ánimo. 

Justicia: Brindar a cada persona la parte que le toca y merece. Asegurarse de que las necesidades de todos estén satisfechas sin importar las condiciones. 

Lealtad: Ser fieles a nosotros mismos y los demás independientemente de lo que suceda. 

Flexibilidad mental: La capacidad de adaptarse y cambiar en medio de las circunstancias fluctuantes de la vida. 

Honestidad: Capacidad para decir la verdad sin importar las circunstancias. 

Perdón: Es la aceptación de los errores entendiendo que siempre hay posibilidad de cambiar o retirarse sin sentir rencor y ganas de venganza. 

Amistad: Es la capacidad de estar ahí para el otro en los momentos difíciles y mostrarse cálido y cercano. 

Autonomía: Valerse por sí mismo para enfrentar la vida. 

Reflexión: Ser consciente las propias emociones, comportamientos y las experiencias que ocurren alrededor. 

Sacrificio: La acción de dejar de lado algunas cosas, emociones, o aun la vida misma para proteger lo que realmente queremos. Dejar de lado algún interés personal por el beneficio de otros. 

Optimismo: Ver y a juzgar las cosas en su aspecto más positivo 

Amor: Sentimiento que nos ayuda hacer el bien con todos los seres vivos, perdonando, ayudando, compartiendo lo que tenemos con sinceridad, respeto y alegría. 

Sabiduría: Es la capacidad para aplicar los conocimientos adquiridos con inteligencia que brindan un mayor entendimiento sobre la vida y nos ayudan actuar con sensatez, prudencia y acierto. 

Fe: La certeza de que Dios hará lo que esperamos, a su manera y en su tiempo. Es la esperanza de que recibiremos algo que aún no tenemos, confiando en Dios 

Paz: Es un estado de bienestar, tranquilidad, estabilidad y seguridad 

Inocencia: Falta de malicia, mala intención o picardía 

Honor: Cualidad moral que lleva al sujeto a cumplir con los deberes propios respecto al prójimo y a uno mismo. 

Voluntad: Es la aptitud de decidir y ordenar la propia conducta. 

Disciplina: Es un ordenamiento personal dirigido a organizar nuestra actitud y conducta para alcanzar un fin determinado. 

Autoestima: La valoración, percepción o juicio positivo o negativo que una persona hace de sí misma en función de la evaluación de sus acciones, pensamientos, sentimientos y experiencias. 

Libertad: Es la capacidad de la conciencia para elegir de manera responsable su propia forma de actuar, pensar, hablar y obrar según la propia voluntad de la persona. 

Aceptación: Reconocer y asumir sin quejas ni excusas las situaciones positivas o negativas que no se pueden cambiar. 

Templanza: Moderación de los apetitos y de la atracción que ejercen los placeres a partir de la razón. 

Humildad: El conocimiento de las propias limitaciones y debilidades que hace restar importancia a los logros personales no se siente especial y no tiene la necesidad de presumir, sentirse superior o recibir reconocimiento, porque reconoce sus defectos y errores. 

Imaginación: Facultad para representar mentalmente sucesos, historias o imágenes de cosas que no existen en la realidad o que son o fueron reales pero no están presentes. 

Esfuerzo: Capacidad para usar la fuerza física o las facultades mentales de forma intensa, prolongada, y concentrada para alcanzar un objetivo o superar obstáculos 

Dulzura: Suavidad y ternura que muestra o expresa una persona y que la hace agradable. 

Honradez: Capacidad de una persona para no tomar lo que no le pertenece, obrando con justicia e integridad. 

Practicidad:Facultad para actuar de la manera más directa, sencilla y rápida posible. 

Concentración: Habilidad para mantener la atención en algo particular o específico. 

Curiosidad: Capacidad para averiguar cosas en base a un comportamiento inquisitivo natural, evidente por la observación. 

Fortaleza: Facultad para resistir o sobrellevar sufrimientos o penalidades venciendo el temor. 

Desapego: Habilidad para alejarse de una unión o deseo por las cosas, experiencias, personas u objetos existentes. 

Madurez: Capacidad para tomar buenas decisiones con buen juicio, prudencia y sensatez. 

Transformación: Habilidad para cambiar defectos por virtudes, aceptando los errores y trabajando para 

Solidaridad: Ayudar sin recibir nada a cambio con la aplicación de lo que se considera bueno. 

Espiritualidad: Una relación sincera, respetuosa, amorosa y devota con Dios. 

Observar: Mirar algo o a alguien con mucha atención y detenimiento para adquirir algún conocimiento sobre su comportamiento o sus características 

Escuchar: Capacidad para prestar atención a lo que uno oye. 

Sensibilidad: Capacidad para percibir sensaciones a través de los sentidos, para sentir moralmente y emocionarse ante las virtudes. 

Prevención: Es la preparación que se toma de manera anticipada para evitar que suceda una cosa considerada negativa. 

Discernimiento: Es el juicio moral que permite al individuo valorizar si una acción es buena o mala. 

Sentido común: Capacidad natural de juzgar los acontecimientos y eventos de forma razonable. 

Liderazgo: Habilidad para ejercer una influencia sobre las personas que permite incentivarlas para que trabajen en forma entusiasta por un objetivo común. 

Análisis: Capacidad para examinar detalladamente una cosa, situación o persona para conocer sus características, habilidades o su estado, y extraer conclusiones. 


Después de leer la definición de cada una de estas virtudes entendemos que no existe un ser humano que sea capaz de tenerlas todas en su máximo esplendor. Sin embargo si existe alguien, su nombre es Cristo Jesús, hombre y Dios al mismo tiempo. Dios se hizo humano para mostrarnos su amor, misericordia y salvación. Nos dio un ejemplo perfecto de humanidad y virtud perfecta, solamente en Cristo puedes encontrar todas las virtudes, porque es la fuente de todas ellas. Jesús nos dijo "sed perfectos como yo soy perfecto" y no estaba mintiendo, se refiere a que nosotros los seres humanos tenemos un origen divino, somos hijos del Dios Altísimo y tenemos un potencial espiritual muerto, que solo puede cobrar vida al aceptar como Dios y Salvador a Cristo Jesús, al despertar ese potencial puedes ser muy parecido a Cristo en virtud.

Las virtudes de Jesús son ciertas actitudes y posturas que desarrollan el mejor yo que podemos ser. Podemos adquirir esas virtudes en nuestras propias vidas e ir formando nuestro verdadero yo con los mismos rasgos de Jesús, siguiendo su ejemplo, con estudio bíblico, oración, ayuno y practicando el bien hacia el prójimo. Cristo nos ofreció en su persona, el ejemplo de todas sus virtudes, las que un ser humano debe practicar. La única limitación que tienes es tu incredulidad y burla, debes sincerar tu corazón con humildad, buscar la ayuda de Jesús y darle una oportunidad de entrar en tu vida para ser virtuoso e inmensamente rico en espíritu.